Sin lugar a dudas la actuación que le cupo a Fangio con la Simca Gordini T11 en su primer contacto con esa máquina en Rosario, tras un abandono y un 5º puesto con una antigua Maserati 4CL alquilada,  fue uno de los pilares que permitieron su posterior y brillante campaña del año 1949, engarzada luego con la intervención en los Campeonato Mundiales a partir de 1950, que culminarían con sus cinco logros ecuménicos.

El título de ésta nota refiere a algunos puntos de inflexión, que de no haber mediado, seguramente no hubieran determinado todo lo sucedido después de aquel 1º de febrero de 1948.

Según recordara Francisco "Pancho" Borgonovo, en el agasajo que el Automóvil Club Argentino, realizó a los pilotos y periodistas extrajeros, entre los que se encontraban los nuestros lógicamente, Jean Pierre Wimille, el por entonces campeón europeo de automovilismo, reconocido por su excelsa conductividad, expresó: "Yo conozco un futuro campeón de automovilismo. Ustedes lo tienen aquí. Fangio" El francés rendía así homenaje a un piloto, que en su tercera participación en lo que luego sería la Fórmula 1, se había permitido rebasar su línea de marcha con una picardía, primero y con habilidad conductiva después, y donde a su vez hizo sendos records de vuelta de la carrera, además de haber aventajado al piloto francés en clasificación, por uno y medio segundos.

En el trazado del circuito del Parque Independencia había una rotonda, que era libre de los volantes tomarlas por uno u otro lado. En general se desplazaban por la derecha y Fangio había dicho la noche anterior. Si llego a venir entre los punteros me voy a mandar por el otro lado y los voy a sorprender. Obviamente se cumplieron los anhelos del Chueco y con esa maniobra en la vuelta décimocuarta superó al francés y más tarde en la trigesimoséptima, volvió a retomar la punta que había perdido anteriormente a manos de Wimille. Después una fisura en el block los haría retroceder notoriamente.

Dice Roberto Jarraud en el libro "Les Gordini" refiriéndose a la carrera de Rosario: "segundo en la segunda eliminatoria, Juan M.Fangio abandonó en la final a una decena de vueltas de la llegada, pero su talento a eclipsado los ojos de todos aquellos que se apasionan por los deportes mecánicos".

Hubo  posteriormente otra aseveración de Wimille en referencia a lo que ya había vislumbrado en Fangio. En ocasión de la visita de los argentinos a Europa en 1948, el 18 de julio concurrieron a presenciar las carreras en Reims, donde se disputaban la Copa de las Pequeñas Cilindradas y a continuación el Gran Premio del Automóvil Club de Francia.

Esta última competencia fue ganada por Jean P.Wimille al comando de un Alfa Romeo 158 y Fangio pudo tomar parte en ambas con dos Simca Gordini, que nada tenían que hacer frente a la potencia de las máquinas de sus adversarios. En ambas  carreras abandonó.

Como luego la delegación argentina se dirigía a París para el regreso al pais, Wimille tuvo el gesto de invitar a Fangio a una entrevista en el diario L'Equipe, que le iba a hacer una nota por ser el vencedor de la carrera del ACF.

En esa ocasión y dirigiéndose al jefe de redacción del periodico, dijo:"les presento al piloto argentino que se atrevió a  correr delante de mí; ya van a tener que escribir de él algún día -y concluyó- va a ser necesario apurarse, ya que ahora se terminarán los paseos de los domingos", haciendo alusión a que con la presencia de Fangio, no iban a resultarle tan fáciles las carreras que disputaría. Lamentablemente Wimille perdió la vida al año siguiente en Palermo a principio de año y no alcanzó a ver las actuaciones de Fangio, que el había presagiado.

El otro personaje - determinante- que  que puso los ojos sobre Juan Manuel Fangio y le cedió una Simca T11 para que cumpliera su destacada actuación, fue Amédée Gordini. 

En ocasión del Grand Prix de Bagatelle, en el Bois de Boulogne, París el 20.05.50, la atención de los más renombrados periodistas franceses estaba centrada en Fangio y prestos a sacar provecho de la presencia de Gordini, inquietamente quisieron conocer las razones que empujaron a le Sorcier (el Brujo), como lo apodaban en Francia, a escoger a ese piloto ignoto en 1948 en el GP de Rosario.

"Fangio era un joven piloto argentino, de origen paisano, y sin gran renombre internacional. Sin embargo era bien conocido de su público por sus proezas realizadas en autos de carretera. Sin duda fue recomendado por el ACA a diversos constructores europeos y también puede ser que Alfa Romeo y Maserati se negaran a confiarle sus máquinas por su falta de renombre. Algunas figuras nacionales estaban ya reservadas. Pero yo observé en Fangio una mirada de acero, gestos precisos, y él hablaba poco, todo eso denotaba  reflejos rápidos, una gran seguridad en si mismo y una sólida determinación. Lo que pasó después, es resultado de la casualidad".

 El autor del libro  "Gordini, un Sorcier, un Equipo", Christian Huet reflexiona: "Instintivamente Amadeo Gordini se hizo casi una apuesta al escogerlo entre varios pilotos.  Puede ser que él haya detectado en seguida sus cualidades. El Brujo ha visto justo, el mundo del automovilismo descubríó, gracias a Gordini, un nuevo campeón".

Para cerrar estos puntos de vista franceses, una nota ciudadana, nos da otra pauta. En París, como en todas las grandes ciudades, no escapan a la regla los inexpertos o malos conductores, especialmente los fines de semana,  A nuestra conocida terminología "andá a lavar los platos" ó "quien te regaló el registro?" en la capital francesa tenía una analogía en "Où va-t-il, chauffeur du dimanche" (a donde va? conductor de domingo). Pero desde la aparición de Fangio en el concierto francés, esa frase derivó en "Où va-t-il, Fangio de dimanche". Tomó actualidad en los '50, continuó en los '60 y perduró hasta principio de los '70. 

Las ya apuntadas expresiones. Sumado al hecho de imponerse en menos de tres meses en 1949 en Pau, Perpignan, Marsella y Albi, todas ciudades francesas, hicieron de Fangio un ídolo en Francia, que indudablemente reemplazó al local Wimille en la atención no solo del público, sino del periodismo automovilístico de aquel pais, y aun hoy a 50 años de lo realizado por Juan Manuel, es común ver en publicaciones como Rétrovisseur, Newlook Automobilisme o Auto Passion, notas referidas a nuestro ilustre balcarceño.

UTaC Team.