La quinta carrera puntuable
para el campeonato se corre en Reims, un trazado particular para Fangio
ya que en este circuito, en el año 1948 había marcado su
debut europeo y ya había ganado tres veces y obtenido un segundo
puesto en competencias de F1. Ferrari presenta cuatro autos, con Fangio,
Collins, Castellotti y el español Alfonso de Portago.
En la clasificación,
los Lancia Ferrari fueron superiores al resto, consiguiendo los primeros
tres lugares por las manos de Fangio, Castellotti a 1.3 y Collins a 1.6
segundos.
En la carrera, Fangio pico
en punta con su Lancia y era verdaderamente inalcanzable, pero misteriosamente
en la vuelta 35 el auto comienza a fallar y debe detenerse en los box,
donde descubren una sospechosa tubería de combustible pinchada.
Le llenan el tanque y vuelve a la pista en cuarto lugar, pero a mas de
dos minutos de la punta. Los punteros eran inalcanzables, aunque el chueco
bajo varias veces el récord de vuelta.
La clasificación final
fue: Collins (Ferrari), Castellotti (Ferrari), Behra (Maserati), Fangio
(Ferrari), Perdisa-Moss (Maserati).
Collins de esta manera se
afirma en la punta del campeonato.
En la prensa levanto revuelo
la noticia de la manguera pinchada. Se sospecho que Fangio estaba siendo
víctima de un sabotaje y para calmar los ánimos, la escudería
le asigna a la maquina de Fangio un mecánico supervisor que se encargaría
durante todo el fin de semana de carrera, de controlar que todo este en
orden.
De todas maneras, íntimamente
la decisión ya había sido tomada. Fangio se alejaría
al final de la temporada de la escudería Ferrari.
UTaC
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