Esta fue la primera carrera de Fangio en el mítico circuito de Spa-Francorchamps. Para la ocasión, utiliza la Maserati 4CLT del equipo Argentino, pero lamentablemente, el motor de la Maserati estaba muy desgastado y sufrió las consecuencias desde los primeros días. 

En las primeras prácticas, lograba tan solo el noveno puesto a 38 segundos del mejor tiempo conseguido por  Farina, que sobre una Maserati similar en excelente estado,  hace un tiempo de 5 minutos 26 segundos. Los Mecánicos desarman el motor y descubren que el problema era un pistón desgastado y lo cambian para la clasificación. Fangio consigue el segundo puesto, lo que le permite largar en primera línea acompañado de Villoresi (Poleman) y Farina.

Pero en la carrera, Fangio tan solo alcanza a completar una vuelta, ya que se rompe ese mismo pistón.
 
UTaC Team.

Villoresi parte en cabeza seguido de Farina, Ascari, Etancelin y Whitehead. Desde el primer momento, la Maserati de Fangio, vencedor de buen número de pruebas desde el comienzo de la temporada, comienza a dar signos de fatiga y abandona en la primera vuelta con un pistón roto.

La batalla se centra en Villoresi y Farina hasta la vuelta ocho (Farina ha cubierto la sexta en 5' 19'' a una media de 163.636 km/h) en la que éste último, tras una derrapada, daña su dirección y abandona casi al mismo tiempo que Parnell, que ha roto la caja de cambios de su Maserati.
Después de 10 vueltas lidera Villoresi. A casi un minuto luchan estrechamente por la segunda posición Ascari y Etancelin mientras algo más retrasados aparecen Whitehead y Rosier.
Villoresi se detiene para repostar y cambiar las ruedas traseras. Luego Ascari hace lo mismo dejando la primera plaza a Etancelin (los Talbot pueden cubrir toda la prueba sin repostar) por delante de Villoresi, Whitehead, Rosier, Campos y Ascari.

En la vuelta 11 abandona levegh con problemas mecánicos en su talbot

Etancelin, conduciendo con su fogosidad habitual que la edad no ha mermado, exprime su Talbot al máximo siempre con sus limitaciones en aceleración y velocidad pura. Se resiste brillantemente a Villoresi que, sin embargo, termina por superarlo en la curva de Stavelot durante la vuelta 14. 

Etancelin comienza entonces a perder rápidamente terreno: su motor no marcha bien.

En la 16 el Talbot de Mairesse sale de pista en Eau Rouge y debe abandonar. En la 19 Etancelin tiene una avería en su caja de cambios y debe retirarse tras su espléndido inicio de carrera. En la vuelta 20 la carrera está encabezada por Villoresi con Rosier a más de un minuto y Ascari tercero a casi dos. El cuarto, todavía más atrás, es Whitehead y Campos, el quinto, marcha ya con vuelta perdida.
Precisamente es Campos quien debe abandonar en la vuelta 21 por una rotura en la bomba de aceite.

Villoresi reposta por segunda vez al terminar la vuelta 22 dejando el mando en manos de Rosier. 

Rosier, perseguido por Villoresi, defiende encarnizadamente su primera plaza. Tras 25 vueltas tiene una ventaja de 25'' sobre el piloto de Ferrari cuando el italiano se ve obligado a entrar de nuevo a boxes en una parada relámpago para un pequeño ajuste. Al nuevo paso por meta tiene una desventaja de 51'' y aunque a falta de nueve vueltas se lanza con todo en persecución del francés, apenas logra recortarle tiempo y Rosier consigue una magnífica victoria estruendosamente festejada por el público belga.