UTaC Team.

El 18 de Febrero de 1951 en Buenos Aires, retorna la escudería Mercedes  a los Grand Prix con los poderosos W154/M163.

Se programa otra temporada internacional, pero esta vez con características completamente distintas a las de los años anteriores. Se invita solamente a un equipo oficial de la casa Mercedes que tanto en hombres como en maquinas presentan títulos notables pero de un tanto tiempo atrás inactivos. Los alemanes son dos pero traen tres autos. Uno será para Fangio. Traen las Mercedes que no corren desde el comienzo de la guerra. Son las fabulosas 3 litros sobrealimentadas. Son maquinas que se pasearon orgullosas por todos los principales circuitos del mundo imponiendo exquisita calidad al comando de Caracciola, Dick Seaman, Faglioli, von Brauchitsch y Herman Lang. En las pruebas de entrenamiento las Mercedes juegan con sus adversarias. Hay una razón potencial para ello. Sobre las Ferrari tienen un litro mas de cilindrada y las superan en casi cien caballos de fuerza. 
Llega el día de la carrera. Se espera la victoria de Juan M. Fangio. Hay una ligera expectativa por la lucha que le pueda ofrecer su compañero de equipo Herman Lang. En cuanto a Karl Kling aun cuando poco cuenta para el calculo tiene, de cualquier forma, reservado el  tercer lugar en el pronostico final. 
Pero los acontecimientos ocurren sorpresivamente distintos. González con su castigada Ferrari 2 litros escapa y domina la carrera. A mitad de recorrido se detiene para reponer combustible. Lo hace mas que por consumo a causa de una fisura en el tanque de la mezcla. Repone la carga; sale detrás de Lang. Persigue; alcanza y gana. 

Extracto del libro "Historia de un campeón. J. Froilan González, por Alberto Salotto, recopilado y publicado en el libro "Historia de una pasión" de Alfredo Parga, Editorial Atlantida-Isaura (C)1992

Una interesante alternativa se producía con la planificación de la Temporada Argentina ya que la serie de circuitos que hasta 1950 se venían utilizando para las pruebas serían reemplazadas por uno sólo y, además de las carreras de autos Grand Prix se agregaría una de automóviles sport con la participación de pilotos argentinos y norteamericanos. La selección de circuito se había concentrado en un trazado que incluía la larga recta de la Costanera Norte y en los mixtos conformados por los jardines que se desarrollaban entre la Avenida Sarmiento y la calle Salguero. El recorrido era pintoresco pues se correría entre árboles y con el fondo del Rio de la Plata aunque, también por los árboles, era bastante peligroso aunque no mucho más que la mayoría de los circuitos "parque" de Europa. Las autoridades de la Temporada habían tenido durante los años anteriores, los inconvenientes propios de trasladar autos, equipos y pilotos de un lugar a otro de los circuitos del interior del país. Ahora se pretendía hacer más eficiente el trabajo y concentrar todos los esfuerzos en un solo circuito que pudiese recibir toda la capacidad de análisis de los hombres del Automóvil Club Argentinos encargados de la organización. El trazado de 3.500 metros de extensión había sido pensado para obtener una relativa paridad entre los autos que estarían presentes. Los dos teams más importantes eran los de Mercedes-Benz y Ferrari que investían representación oficial. Luego había algunas veteranas Maserati 1500 c.c., Alfa Romeo 3.800 c.c. y algún Ferrari que había quedado en el país de carreras de años anteriores. A nuestro país llegaron las poderosas pero antiguas Mercedes-Benz W163 de tres litros, 500 caballos y 900 kilos que no participaban del Campeonato del Mundo pero que intervenían en diversas pruebas sin puntaje como, por ejemplo, las de Argentina. El equipo Ferrari, que si corría el Mundial, presentó sus autos menos potentes pero mucho más livianos ya que pesaban 600 kilos. El circuito elegido lejos de emparejar las posibilidades, favorece en cierta medida a las Ferrari. 

En la primera de las dos carreras, la "Perón Cup Race" como figura en el libro de Anthony Pritchard sobre las Ferrari de Grand Prix, José Froilán González impone su estilo y su categoría de piloto de múltiples recursos ganando la carrera con 17 segundos de ventaja sobre el segundo clasificado que es el alemán Hermann Lang con el Mercedes-Benz W163. González también se impone a Juan Manuel Fangio quien integra como invitado el equipo Mercedes-Benz y se clasifica tercero. Sólo estos tres hombres llegan en la vuelta marcada por los organizadores para cumplir el recorrido ya que los que se ubican inmediatamente detrás lo hacen con una vuelta menos y son los argentinos Oscar Gálvez, con una Ferrari de dos litros y Alfredo Pián con una Maserati 1.500 c.c.. 

Por gentileza de Jorge Augé Bacqué y Automóvil Sport.

El miércoles 14 de febrero de 1951, el porteño, leyendo los matutinos, tomaba conocimiento de  que "en el nuevo circuito de la Costanera Norte, se realizará mañana la primera sesión de adiestramiento de los inscriptos para correr el domingo el Gran Premio Presidente de la República General Juan Perón"

Y algunas cosas más. Que los pilotos alemanes Herman Lang y Karl Kling, apoyados por los mecánicos de la casa Mercedes Benz habían realizado durante la víspera, una prolija labor en los coches de ese sello, mientras que Oscar Gálvez que correría una Ferrari 2000 después de un "cierto alejamiento", había probado su máquina en la Avenida General Paz (¿qué era  eso que se llama seguridad?) y se mostraba satisfecho del rendimiento.
Después otros informes. La práctica del jueves -como la del viernes- iba de 6 a 8 de la mañana. Calcule. ¿Usted tenía interés? pues ¡¡claro que si!! Entonces a levantarse a las 3 de la mañana  (o a no dormir) para estar cuando menos ubicado a eso de las 5 en algún lugar estratégico sin que lo molestara nadie...

El Parque

El ofrecimiento era tentador. Los alemanes y Fangio con las Mercedes W163 de 12 cilindros que reaparecían después de mucha inmovilidad. Gálvez volvía con la Ferrari con la que ya había ganado Fangio. Un coche de similares características para José Froilán González (en adelante y respetuosamente lo llamaremos Froilán) y esto más: 
José Félix Lopes y Luis A. De Dios con Simca
Alfredo Pián, Victorio Rosa y Pascual Puópolo con Maserati 1500
Alberto Crespo, Onofre Marimón, Roberto  Mieres, Eitel Cantoni y Jorge Daponte con Maserati "a secas"
Clemar Bucci con Alfa Romeo 4500
Héctor Niemitz con Alfa Romeo 2800
Carlos Menditeguy con el Alfa 3800 ex Gálvez (recientemente vendida)
y la noticia de base: A Benedicto Campos lo acompañan unos amigos que están tratando de recomprar  el Alfa 3800 que fuera de Gálvez (con lo que de prosperar la gestión, Menditeguy podía pasar a ocupar un lugar en el palco).
Como para que todos nos quedáramos tranquilos, yendo a descansar para levantarnos de noche, confiados y serenos , se informaba a la población que "sólo faltan colocar los fardos de pasto de protección en las curvas y sitios peligrosos"... Todo lo demás, estaba...

$$$$$

El precio de la entrada para ver la clasificación del sábado fue de 5 pesos (de los "buenos" de los de antes,  claro). Para el domingo había tres opciones: tribunas, 50 pesos (se veía un poco más lejos), generales de 20 pesos (para estar cerca de los boxes) y generales de 5 pesos (donde podía ver pasar los "bólidos").
La carrera comenzaría el domingo 18, a las 5 de la tarde. Sobre 45 vueltas. Como el circuito medía 3500 metros, la prueba sería de 157,5 km. 
El jueves amaneció feo, con llovizna. La práctica empezó a las 7, porque hubo que acomodar un mundo de gente. Lang hizo el mejor tiempo 2m 3s4/10 a 102,130 km/h seguido de Kling (2m8s5/10) y de Fangio 2m15s9/10). Después venían Froilán (2m19s8/10) Bucci y Pián. Y más atrás, sucesivamente, Puópolo, Marimón. Mieres, Lopes, Gálvez, Crespo, De Dios y Daponte. 

El pez por la boca...

Hubo críticos que después de ver aquel primer entrenamiento aventuraron categóricos juicios. Y se incineraron mortalmente abrasados.  Por respeto a un tiempo diferente, aquí serán omitidos piadosamente sus nombres. Los equivocados afirmaban cosas como ésta: "Quedó demostrado la amplia superioridad de las Mercedes sobre las demás máquinas..." En el rubro de las novedades se informó que no se habían presentado Rosa, Niemitz (que recién llegaba de Paraná) y Menditeguy (cuyo Alfa 3800 recién quedaba terminado la tarde de la primera práctica, repasada por el inolvidable Ricardo Carú). Así como al pasar, se avisó a la población que "el director de la prueba dispuso que desde el viernes, segunda práctica, se corre hacia  la derecha y no hacia la izquierda, como se estaba haciendo. La alteración obligará a los pilotos a extremar el cuidado en algunas curvas...", ¡Bendito sea Dios!.

A Templar (De frío)

Se hizo el viernes la segunda práctica. Fangio -sin igualar lo del día anterior, de Lang- fue el más rápido con 2m8s (98,437 km/h) seguido de Lang (2m8s5/10) y de Bucci (2m12s7/10) cuando Froilán se adelantaba a Kling, a cuya cola se veía a Niemitz. Increíble. Fue un día frío, con vientos del río color de león y mucha gente, que no se quería perder nada de aquello. Se había invertido el orden de marcha y a las 7 y 20 Pián pudo comprobar que no todo era coser y cantar porque se despistó a la altura de la barrera de la avenida Sarmiento y se llevó puestos a los inspectores policiales, averiándoles un poco la ropa. Aquel día se entrenó Menditeguy. Fue 14º entre los catorce "ablandando" el auto: 2m37s9/10. La clasificación la ganó Fangio mejorando todas las marcas: 2m1s7/10 a 103,453 km/h, seguido de Lang (2m3s7/10) y de Froilán -con la Ferrari chasis corto- orientando la clave de la "temporada" porque la "tromba de Arrecifes" ya había fagocitado una Mercedes (la de Kling que quedó cuarta adelante de la 3.8 de Menditeguy que hacía mejor las cosas que el día anterior). Mucha gente. 14 autos en la pista y fallas en los coches de Marimón y Crespo que no pudieron rodar bien, los que sumaron su día perdido a las ausencias de Rosa y Cantoni.

La primera paliza

Lindo día el domingo. Una multitud. Una sorpresa de entrada, cuando se informó que el ACA había reconocido que Kling había sido 3º el sábado y que Froilán, por ser cuarto, entonces largaba desde la segunda fila (¡Y bue que se va hacer!). Era obligatorio usar casco protector. La mayor parte de los pilotos corrió como se le daba la gana. ¿Qué es eso de los "reglamentos están para ser cumplidos? 
El presidente Perón y su señora esposa llegaron a las 16,50; saludaron a todos los corredores. Se ubicaron en el palco de honor y todo quedó listo para correr. Picó en punta "el chueco" pero lo pasó Lang. Cuando la gente vio pasar la caravana por la mano opuesta de la recta paralela al río, comprobó que Froilán estaba segundo, adelante de Fangio, Menditeguy, Kling, Bucci, Pián y Niemitz. Entonces estalló la primera gran ovación. Paralelamente Mieres paró en esa vuelta. En la cuarta vuelta Fangio se colocó segundo al volverlo a pasar a Froilán. Lang completó las primeras cinco rondas en 10m28s3/10 pero en la sexta vino la desilusión, Fangio entró al box para cambiar la rueda delantera derecha y perdió medio minuto, cayendo al 8º puesto. A las diez vueltas Lang acumulaba 20m41s seguido de Froilán, Menditeguy, Kling y Bucci. Paró el Charlie en la vuelta 13, cambió bujías y siguió pero muy atrás. Bucci superó a Kling sacándole el tercer puesto; Fangio había recuperado y estaba cuarto y antes de las 20 vueltas se notaba que el ruido de las Mercedes no era bueno. Atacó Froilán, se puso a la cola del puntero -irreverente- y al entrar a la corta recta que terminaba en la avenida Sarmiento, aquel le hizo señas que se le adelantara (¡¡notable!!) y Froilán le hizo caso. Fue estruendosa la ovación. A las 25 vueltas, Froilán empleaba 52m9s4/10 seguido de Lang, Bucci y Fangio que en la vuelta 29 superó a Bucci. El tiempo de Froilán a las 30 vueltas era de 1h2m41s1/10. Siguen las emociones..... Froilán que llevaba medio minuto a Lang, paró en el circuito 34 para cargar combustible: 40 litros en 40 segundos. El alemán volvió a ser líder pasando por el control a toda velocidad cuando el argentino entraba otra vez en la pista. Ni siquiera allí se perturbó Froilán. Pisó bien el acelerador y en cinco vueltas cazaba al alemán. Fangio circulaba tercero y con angustia, porque su auto era el que más fallaba de los Mercedes y tuvo que luchar como gato entre la leña para retener la tercera plaza. Al final ganó Froilán (1h35m18s9/10 a 99,143 km/h), seguido de Lang (1h35m35s1/10) y de Fangio (1h36m10s4/10). Gálvez terminó cuarto, a una vuelta. Pián fue quinto y Kling sexto, debiendo también una vuelta. El record había sido de Fangio, al completar el quinto viaje en 2m2s2/10 a 103,109 km/h.